MI VIAJE A BÉLGICA 

 Mi viaje a Bélgica fue un viaje magnífico, desde que era bien pequeña empezó a interesarme este lugar y siempre me hizo mucha ilusión viajar a aquel país. Sin duda alguna, volvería a repetir ese viaje un millón de veces.

Todo comenzó como una locura, mi familia sabía que tenía muchas ganas de ir , pero en ningún momento pensé que ese día llegaría y mucho menos tan pronto. Como todos los años en mi colegio, proponían un viaje para la mayoría de cursos del centro, y propusieron un par de lugares para pasar unos días. Hablando por el grupo de mis amigos unos cuantos decidieron que si que iban a ir al viaje, pero que aún no sabían el lugar que iban a votar para viajar.
Los meses pasaron y llegó el día de hacer las votaciones para saber a que lugar nos gustaría viajar, y tan solo dos semanas más tarde ya sabíamos donde íbamos. No podía creerlo, ni de broma pensaba que el sitio sería Bélgica, y cuando llegué a casa un amigo mío me mandó un mensaje para darme la noticia si aún no había llegado a mis oídos. Hace un tiempo él y yo habíamos hablado de irnos a ese viaje pagando cada uno una parte del viaje, pero no a mitades. Y aún que el viaje no lo íbamos ha hacer solos, estaba mejor planeado, ya que ninguno de los dos iba a gastarse un riñón en mantener al otro.
Las semanas iban pasando y ya empezaban a meternos prisa con el tema de los pagos y con el de sacarnos el pasaporte y los demás papeleos que eran necesarios para el viaje. A medida que pasaban los días y ya íbamos teniendo las cosas casi preparadas me ponía más nerviosa. Me hacía tanta ilusión hacer este viaje que tenía la misma ilusión que un niño pequeño la noche de reyes.
El día anterior al viaje mientras preparaba las maletas y revisaba todo mil veces para que no se me olvidara nada, pensaba en la ilusión que me hacía este viaje y que por fin iba a cumplir uno de mis mayores sueños.

Llegó el día del viaje y creo que nunca en mi vida había estado tan nerviosa, el hecho de ir en autobús unas horas y luego esperar en el aeropuerto para hacer un viaje en avión, me daba un poquitín de miedo.
 Una vez que estábamos allí era como si hubiese estado allí un tiempo atrás me sentía como en casa, como si hubiese estado allí toda la vida .
Nada más llegar al hotel donde íbamos a alojarnos, a cada uno nos agenciaron una habitación, con gente que no conocíamos mucho y con amigos de toda la vida.
Durante nuestro viaje visitamos muchos lugares, comíamos en sitios típicos de allí, para aprender la cultura del país.
Todo lo que había allí era totalmente distinto a lo que había en España.
Lo más complicado fue poder comunicarnos con la gente de allí, porque aún que conocíamos el idioma, hablaban muy deprisa y no conseguíamos pillar todo lo que nos decían.

   
Estando allí descubrimos lugares tan impresionantes como los de las fotos, todo allí parecía mucho más bonito, pero supongo que era porque aquí en España las cosas no se hacían de la misma manera o porque ya teníamos todo muy visto.
Los días iban pasando y allí conocimos a gente que se convertirían en nuestros amigos para toda la vida, recalco un grupo de españoles, procedente de Guadalajara, que se hicieron nuestros amigos y que incluso unificaron sus guías con las nuestras para que todos nos lo pasáramos mejor, incluidos los monitores.
El último día, todos nos encontrábamos un poco tristes, con muchas ganas de volver pero también con muchas ganas de quedarnos allí y de disfrutar una vez tras otra las historias que habíamos creado, que sin duda alguna, quedarían grabadas en nuestra mente para toda la vida.
En el camino de vuelta hacia España, estuvimos todo el viaje hablando de que nos había gustado más y menos, de las que habíamos liado y de todos los buenos ratos que habíamos pasado todos juntos.
Cuando ya estábamos con nuestra familia y todos vinieron a recogernos, tuvimos un sentimiento en conjunto, como echaba de menos mi hogar.
Sin duda alguna, volvería a repetir todos los momentos que viví en el viaje, porque a parte de enseñarme una cultura nueva y de haberme dado cuenta que realmente si que me encantaba ese país, me llevé grandes amistades y grandes historias de esta esperiencia.